Crianza y Trasiega tradicional
Crianza y Trasiega tradicional

Crianza y Trasiega tradicional

Crianza

La fase de crianza es una etapa vital en la consecución de la identidad y calidad del vino.

Para ello Bodegas Hermanos Peciña cuenta con 3 naves con 4.500 barricas de roble americano de tostado medio.

Los vinos de Bodegas Hermanos Peciña se caracterizan por sus largas crianzas, tanto en barrica como en botella, sobrepasando considerablemente los mínimos exigidos por el Consejo Regulador de RIOJA. Y para que los vinos no sepan excesivamente a madera, en su línea de “Señorio de P.Peciña”, utiliza siempre barricas previamente envinadas. Ésta metodología, unido a un riguroso control mediante catas continuas, va a permitir que nuestros vinos sean sean redondos, aterciopelados, suaves en boca y con largo retrogusto.

Una vez concluido el proceso de envejecimiento en barrica, el vino se embotella para permanecer un mínimo de año y medio en nuestra bodega antes de salir al mercado. Así, se van a pulir todos los matices agresivos que el vino tiene cuando sale de la barrica, obteniendo un producto redondo y con expectativas de mejora con el paso del tiempo, obviamente siempre que se conserve en óptimas condiciones de humedad, temperatura y oscuridad.

 

Trasiega por decantación y gravedad 

Una de las principales características que distinguen la elaboración de nuestros vinos es la trasiega o limpieza de posos por el método tradicional de gravedad y decantación, sistema hoy en día en desuso y realizado únicamente por unas pocas bodegas en Rioja.

El sistema de apilado manual a 5 alturas de nuestras barricas nos permite realizar trasiegas por el sistema tradicional de gravedad y decantación, para limpiar el vino de forma natural, sin necesidad de filtrados ni clarificados que dañarían las aptitudes de nuestro producto.

Un pequeño agujero a 5 cm de altura en la parte baja de la barrica, llamado “falsete”, nos permite obtener todo el vino limpio y dejar en el fondo, bajo esos 5 cm, todo el poso  o sedimentos naturales que el vino tiene. Es decir, por decantación, sin agitaciones ni bombeos, obtenemos un vino limpio sin maltratos, ya que todos los movimientos innecesarios únicamente perjudican al producto.

Este proceso es costoso y necesita más tiempo para realizarlo que el sistema mecanizado, pero una vez más, consideramos que nada es suficiente para el resultado que buscamos, un vino totalmente natural y que exprese el terroir de la Sonsierra.

 

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